domingo, 22 de mayo de 2011

Patio Pintado o Patio 2.

También conocido como Patio Rojo, es de mayores dimensiones que el Blanco, al centro, presenta un adoratorio totalmente reconstruido por Miller, en 1973.  Taludes y tableros de cuatro basamentos, rodean a este espacio abierto. Las fachadas de los basamentos, corresponden a un nivel arquitectónico posterior al Patio Blanco, es decir entre los años 450 y 600 años d.C.

Los cuatro taludes estaban decorados con una hilera de cuchillos, las entrecalles de los tableros por serpientes, y las molduras con figuras geométricas en forma de puntas. Estos motivos se repetían en los otros tres basamentos de los templos.

Las medidas aproximadas de los seis murales son (largo x alto): mural 1; 0.4m x 0.50m, Mural 2; 4.10m x  0.78m, Mural 3; 3.0m x 0.76m, Mural 4; 2.30m x 0.91m, Mural 5; 2.55m x 0.82m, Mural 6; 3.0m x 0.68m.
El tema principal en los tableros de ambos lados de cada escalinata, consiste en el cuerpo completo de una serpiente emplumada que se dirige hacia el eje central de cada edificio. Considerando que el total es de 4 basamentos ubicados hacia cada uno de los puntos cardinales de este patio, es de suponer que existieron ocho serpientes, sin contar las representadas en las fachadas de los templos.

Cada uno de estos llevaba uno el cuerpo cubierto de figuras elípticas, una detrás de la otra, mediante un trazo de delgadas franjas que se abren y se unen a intervalos regulares. Estas a su vez, se adornan con imágenes palmeadas.

De su hocico entreabierto, se observa sus dientes y colmillos, su lengua bífida y unas gotas, posiblemente de agua. Sus fauces llevan plumas pequeñas en la misma forma que adorna la gran espiral o voluta que surge de su ceja. La cola termina en cuatro cascabeles con círculos y una larga hilera de plumas.

Esta representación de los elementos arriba señalados, se repetía con algunas variantes en los otros tableros. Sin embargo, debido a que los basamentos ubicados en los lados oriente y poniente de este patio son más largos, el cuerpo de la serpiente probablemente tenía una mayor longitud, donde las figuras elípticas que adornan su cuerpo debieron de aumentar en número.

En las molduras de los tableros se encuentran figuras geométricas realizadas a través de una sucesión de franjas en forma de puntas de flecha que se distinguen entre si por los diferentes tonos de rojo. Las superiores e inferiores las flechas apuntan en sentido contrario al de las serpientes, mientras que en las verticales siempre señalan hacia abajo.

Pórtico 2, mural 1 (serpiente emplumada sobre pilastra)

Fragmento mural que cubre el desplante de la pilastra norte del pórtico. Hay en esta sección cuatro espacios porticados correspondientes a cada uno de los puntos cardinales y que delimitan a este Patio Pintado. En cada pórtico se encuentran dos pilastras, sumando un total de ocho que debieron estar pintadas de igual forma.



Cuarto 1, murales 1-6
Representados en los cuatro muros del interior del aposento sur en el conjunto denominado Patio Pintado. Esta unidad corresponde a un nivel ocupacional posterior al Patio Blanco, posiblemente entre los años 500 y 600 d.C.

En las secciones más bajas de algunos de estos murales se muestrean huellas de quemado, posible señal para soportar una de las teorías sobre el colapso de Teotihuacan, la cual dice que fue incendiada. Fragmentos que van desde 1.95m x 4.95 hasta 0.38m x 0.59m.

Debido a su mala conservación, es difícil conocer el tema principal de estos murales, sin embargo, gracias al dibujo reconstructivo elaborado por el sr. Santos Villasánchez, nos podemos dar una idea aproximada.

Resaltan grandes caracoles emplumados colocados a intervalos regulares a lo largo de las paredes y conservando la misma altura, representan instrumentos musicales y llevan una boquilla en el ápex o su extremo proximal de donde sale una ancha vírgula adornada con pequeños cuadretes en grupos de tres., aplicaciones de círculos y figuras elípticas en un rojo fuerte-

El collar y el atuendo colocados en el busto del personaje, se forman de cinco hileras de elementos, cerca del cuello lleva un collar de cunetas tubulares y el amplio collar remata con dos líneas de plumas estilizadas. Con su mano derecha sostiene una bolsa de forma ovalada, en cuya superficie se notan trazos irregulares como escamas de tortuga.

Patio Pintado, Cuarto 1, murales 1-6 (bustos sobre caracoles emplumados)
 
 

Patio Blanco, Pórtico 1 murales 5-7

Los tres murales presentan un reticulado de franjas diagonales que forman espacios cuadrangulares, en cuyo interior se representan figuras humanas de pie con un fastuoso atuendo guerrero.

Las diagonales están cubiertas por líneas que imitan el pelo del coyote, sobre estas, una figura en forma de borla con dos espigas, muy similar a la malinalli o zacate de carbonero (según J. Angulo). En la unión o el cruce de cada franja que forman los espacios reticulados, se aprecia un medallón circular, adornado con pequeñas placas rectangulares superpuestas alrededor de un disco de cuyo centro , cuelga la cabeza de un coyote con el hocico abierto.

El tema central de los tres murales son figuras humanas vistas de perfil que van enmarcadas en los espacios cuadrangulares que forman la retícula. Su fastuoso atuendo consiste en un disfraz de coyote con elementos flamígeros en diferentes partes del cuerpo. Los elementos que caracterizan a estas figuras como antropomorfas son los pies; los cánidos están representados por la cola, la cabeza donde se señala la nariz alargada, el hocico abierto con los dientes visibles.

Las figuras humano-coyotes llevan sandalias adornadas con grandes hebillas, de cuyos pies emergen protuberancias flamígeras.

sábado, 21 de mayo de 2011

Patio Blanco, Pórtico 1 murales 1-4

Se encuentran simétricamente ubicados a ambos lados de la línea de acceso al templo. Los murales 1 y 4 miden 1.85m de largo por 0.72m de ancho. Y los murales 2 y 3, 1.68m por 0.72m de alto.

En este mural el color rojo se utilizó en tres tonos: rojo claro; para el diseño en líneas gruesas, tono mediano; para rellenar los espacios delimitados, rojo intenso; para el fondo.

Inicia con la representación de dos coyotes, uno seguido del otro horizontalmente, los que aparecen en los muros laterales se dirigen hacia el exterior, y los que se encuentran en lis murales frontales, se dirigen hacia el eje central del templo. La silueta superior de su cuerpo, sus patas y su cola en su borde exterior se adornan con flecos. Portan un gran tocado que se sostiene con una diadema ondulada. En el centro de su cuerpo aparece una figura circular con bandas circulares que al parecer es un chimalli.

Cenefa.
Cada mural está delimitado con en su bordes laterales y superior, por una cenefa compuesta por  tres líneas delimitadas. La franja inferior es la más ancha y representa la piel del coyote.
La franja intermedia es mucho más angosta y se forma con la sucesión de pequeñas plumas colocadas transversalmente a la cenefa. En la parte superior, simétricamente distribuidas al centro y  a los costados, se encuentran tres escudos de forma ovalada cuyos bordes se cree son la representación de pelo de coyote.

Atetelco: Localización de los tres pórticos dentro del Patio...

Atetelco: Localización de los tres pórticos dentro del Patio...

Estos conjuntos se integran en torno a un patio central con adoratorio. La sección del Patio Blanco corresponde al segundo nivel constructivo de una secuencia de cuatro superposiciones, y a su estilo pictórico se le adjudica una cronología tardía.

Localización de los tres pórticos dentro del Patio Blanco.

Patio Blanco